Parada
y fonda
La Fonda Europa es una casa de vivencias y también icono de un pasado histórico y una herencia cultural de lo más notables. Al encontrarse en un enclave estratégico como era el camino hacia Francia, los viajeros de la época tenían la costumbre de hacer “parada y fonda”: dejar descansar a los caballos y recuperar fuerzas con una buena vianda y un buen reposo. Esta casa ha vivido grandes momentos históricos desde 1771 y ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos sin perder su esencia. Una atmosfera que ha atraído artistas de renombre como Picasso, Dalí, Tàpies, Miró, Cela, Pla, Eugeni Xammar o Montalbán.
Tradición
fondista
Un establecimiento con tanta alma tiene que tener un gran artífice detrás. En este caso, lo es la familia con más historia en el mundo de la hostelería del país: los Parellada, dedicados a preservar el oficio fondista siendo fieles a una tradición hospitalaria de finales del siglo XVIII. Actualmente, la fonda está regentada por la octava generación de un gran linaje sinónimo de modestia y dedicación.